Las investigaciones de la unidad que dirige contra el entorno de Sánchez han llamado la atención del presidente
El teniente coronel de la Guardia Civil Antonio Balas Dávila se ha convertido, desde la jefatura del Departamento de Delincuencia Económica de la Unidad Central Operativa (UCO), en una figura clave de la lucha contra la corrupción en España. Con investigaciones que alcanzan al entorno del presidente del Gobierno, al exministro José Luis Ábalos y a redes de fraude multimillonarias, su nombre ha pasado del anonimato institucional a convertirse en una molestia creciente para el PSOE en particular. Tanto, que este lunes se ha revelado un audio del entorno socialista en donde se ha asegura que «si conseguimos acabar con Balas, desaparecen todos nuestros problemas».
Balas asumió en 2020 el mando del departamento económico de la UCO, en sustitución del reputado teniente coronel Francisco Almansa, quien había liderado los casos Púnica, Lezo, Erial y los ERE andaluces. Su nombramiento no supuso un cambio de rumbo, sino una continuidad firme en la prioridad de perseguir el fraude fiscal y la corrupción política.
Su carrera ya estaba marcada por logros de calado. En 2019 dirigió la operación Drake, el mayor golpe contra el fraude del IVA en el sector de hidrocarburos en España hasta la fecha. La investigación desmanteló una red que había defraudado más de 150 millones de euros mediante un entramado de más de 300 sociedades instrumentales y testaferros. Balas aseguró entonces que se había «dejado prácticamente a cero» este tipo de actividad delictiva.
Pesquisas incómodas: del caso Koldo al entorno de Sánchez
Bajo su supervisión, la UCO ha desarrollado investigaciones de alto voltaje político. Entre ellas, destaca el caso Koldo, que afecta directamente al exministro de Transportes José Luis Ábalos. Según uno de los informes elaborado por su equipo, Ábalos habría desempeñado un papel «relevante y de responsabilidad» en una presunta trama de adjudicaciones irregulares de contratos públicos durante la pandemia a través de su entonces asesor Koldo García.
También están bajo el foco de la UCO las actividades de Begoña Gómez, esposa del presidente Pedro Sánchez, y de su hermano David Sánchez, en investigaciones aún abiertas que indagan sobre posibles irregularidades en la gestión de fondos públicos y contratación administrativa.
Bajo presión: «Acabar con Balas»
Estas investigaciones han convertido a Balas en un objetivo incómodo para el PSOE. Según una conversación revelada por El Confidencial, María Leire Díez Castro, asesora cercana al secretario de Organización socialista Santos Cerdán, habría intentado obtener información comprometedora sobre él. En una videollamada con un empresario investigado Alejandro Hamlyn, presidente de Hafesa, una compañía salpicada por el fraude, afirmó que «si conseguimos acabar con Balas, desaparecen todos nuestros problemas».
Tal y como apunta el medio que publica esta información, Leire Díez pidió a Hamlyn información sobre Balas en una videoconferencia, en la que estuvo acompañada por el empresario Javier Pérez Dolset, procesado por fraude en subvenciones y colaborador de Ferraz, y el abogado Jacobo Teijelo. Fue ahí en donde Leire Díez aseguró a Hamlyn que si caía el teniente coronel de la UCO, eso sería el comienzo del fin de todos sus problemas, según señala El Confidencial.
Reconocimiento oficial y perfil académico
En 2014, el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, entonces bajo el mando de Fátima Báñez, reconoció su trayectoria concediéndole la Medalla al Mérito en el Trabajo.
Además de su labor operativa, Balas ha contribuido a la reflexión profesional con trabajos académicos, como su artículo sobre la financiación de la delincuencia organizada en la revista Cuadernos de la Guardia Civil, donde analiza cómo se adaptan las redes criminales a las nuevas formas de blanqueo y evasión.
Fuente: The Objetive
